Tarta de queso light baja en calorías sin horno

Hola a todos! ¿Cómo lleváis este día? Es como si hiciera un año que no escribiera un post... entre el TFG, llevar la casa, y salir a andar mi tiempo se consume tan rápido que ya casi ni recuerdo lo que era escribir aquí.

Y bueno, como los reencuentros siempre son bonitos y muy dulces hoy os traigo una deliciosa receta que se tarda muy poco en hacer y es apta para todos los consumidores. Sin más vamos a ver cómo se hace:


      Un paquete de galletas estilo Galletas María (en mi caso es sin azúcares aunque podéis usarlas integrales porque dan un sabor mucho más rico).


      Dos cucharadas de Mantequilla light.


      Un sobre de gelatina de limón (si la tenéis de fresa os saldrá como un petit suisse).


      Un brick de 200 Cc más o menos de leche evaporada (en esta receta uso esto para hacerla light, si no lo encontráis podéis hacerlo con nata para montar).


      Una tarrina de queso de untar estilo philadelphia light.


      Dos cucharadas rasas de azúcar o un sobre pequeño de sacarina.


      Para el topping, mermelada de fresa o al gusto sin azúcares.




      En primer lugar, vamos a hacer la base de galletas. Para ello en una jarra picadora o picadora de mano vamos a echar las galletas partidas y las vamos a picar hasta que queden trocitos muy muy pequeños, casi polvo. Antes de tener picadora to lo hacía en un mortero. Cuando está listo, echamos dos cucharas de mantequilla a temperatura ambiente y lo metemos al microondas durante unos pocos segundos. Cuando vemos que se ha derretido, lo sacamos y mezclamos todo bien. A continuación lo ponemos en la fuente donde vamos a servir la tarta de queso y con una cuchara o con las manos mismamente lo aplanamos. Una vez hecho esto, lo metemos al frigorífico.


      Posteriormente, vaciamos el contenido del brick de nata o leche evaporada en un cazo y lo ponemos a calentar. Una vez caliente y sin que llegue a hervir, echamos la gelatina de limón o del sabor que queráis y removemos hasta que no haya ningún grumito. Mientras tanto, vaciamos en una jarra o recipiente apto para batir el queso de untar y las dos cucharadas rasas de azúcar. Vaciamos el contenido del cazo en el recipiente del queso y azúcar y batimos como si no hubiera mañana hasta que todo esté bien integrado.


      Por último, vertemos la mezcla en el recipiente donde teníamos la base de galletas. Lo volvemos a meter al frigorífico al menos 4 horas. En mi caso me gusta dejarlo una noche, pero si lo hacéis por la mañana podréis degustar este riquísimo postre para cenar. Cuando la tarta deje de estar líquida se echa por encima la mermelada de fresa o del sabor que os guste y ¡listo!



¿Habéis visto la delicia de tarta que os dejo? Lo bueno es que aunque sea un pecadito siempre es un poco más sano que si se emplean otros ingredientes con más grasa y os aseguro que sabe absolutamente igual. Además, podéis añadir más tipos de queso a la mezcla, una vez incluí queso de burgos y gelatina de piña y al Señor Don Gordito le encantó.



Bueno nada más y nada menos, espero que os guste mucho mucho esta receta y que me digáis en los comentarios cómo hacéis vosotros las tartas de queso. Y si no la habéis hecho nunca, esta es una receta súper fácil y podéis hacerla hasta con niños. 
Espero que paséis un gran día, tarde o noche y nos leemos en la próxima entrada.
Hasta la próxima!!


0 comentarios:

Publicar un comentario

¿Te ha gustado? Yo no gano nada haciendo esto, pero me gustaría saber tu opinión :) Gracias

MBG. Con la tecnología de Blogger.