¿Qué es la urticaria al frio? Mi experiencia

Hola a todos, hoy tenemos un día gris y lo que ha comenzado siendo un día cálido va a terminar en un fin de semana bastante fresquito... y con fresquito me refiero a que va a hacer más frío que en todo el invierno (o eso decía el hombre del tiempo). 

Comienzo con el día frío porque de eso va a tratar la entrada de hoy. Es algo bastante personal y que no todo el mundo logra entender. Si alguien está en mi situación se dará cuenta de que a veces ni los padres consiguen descifrar lo enigmática que es esta alergia o enfermedad que le sucede a un porcentaje tan bajo de la población mundial.

Urticaria al frío se conoce como esa alergia que sucede a ciertas personas que cuando salen a la calle o se meten en una piscina o simplemente, porque su cuerpo nota un cambio de temperatura frío, salen unos granitos en la piel que se conocen como ronchas. Estas ronchas van creciendo y uniéndose entre ellas y provoca un gran picor y mucha sensibilidad en la zona. Quizás dependa de la persona, pero lo que comienza siendo por una simple rojez en el cuello, cara o manos, se puede convertir posteriormente en una roncha humana.

Generalmente sucede al estar en frío o, como he dicho antes, cuando el cuerpo o la piel nota un descenso de la temperatura en alguna zona. Con esto me refiero a que si estás en verano y tienes calor y te sientas en el suelo, tu estarás a gusto porque no pasarás calor, sin embargo entre los tres y cinco minutos que hayas estado sentado notarás que empiezan a picarte esas zonas que están en contacto con el suelo. Primero es un poco de picor bastante soportable pero posteriormente se vuelve inaguantable hasta el punto de marearte y si no te levantas rápido puedes tener serios problemas, de los cuales te hablaré a continuación. Pero primero dejadme que os cuente mi historia:

Cuando nací yo era un corgi normal y corriente, en invierno no me salía nada y en verano tampoco. Fui creciendo y cuando cumplí los 4 años mi cuerpo tuvo un pequeño cambio. Cada vez que hacía frío o mi cuerpo notaba una zona fría se enrojecía y me salían ronchas. Cuando mis padres me bañaban veían que me tenían que secar muy rápido porque en seguida se me ponía el cuerpo completo de ronchas que picaban y tardaban mucho en irse. Más o menos una media hora.

Preocupados por mí, mis padres decidieron llevarme al médico. Primero me hicieron bastantes análisis de sangre y no salía nada en los resultados, posteriormente me hicieron una prueba que consistía en que una mujer me pasaba hielos por el brazo durante una hora o más para ver qué sucedía. Al ver la reacción de mi cuerpo, observaron que lo que yo tenía era conocido como "Urticaria al frío" o como se conoce en estos lares del internet "Urticaria a frigore". A ciertas personas les salía con más frecuencia y a otras con menos. A unas personas les sale sólo superficialmente, como es mi caso, y a otras también al beber o comer comidas muy frías. 

Con esto, a mis padres les advirtieron que podía tener unas consecuencias bastante desagradables. Las palabras textuales de mi madre eran: -"hija, no te metas mucho en la piscina que te puedes marear, perder el conocimiento y ahogarte".

Mi madre no iba mal encaminada, pero en palabras un poco más adultas se puede decir que tiene tres consecuencias:

       Hipotensión arterial.

       Shock.

       Muerte.

En mi caso, no puedo hablaros de las dos últimas, puesto que no me ha pasado y si me hubiera pasado pues sería bastante extraño que ahora tuviera un blog y os estuviera hablando de esto. Pero sí os puedo hablar acerca de mi experienza con la hipotensión arterial.

Desde los cuatro años hasta los 19 más o menos, tuve mis rachas buenas y mis rachas malas. A rachas malas me refería a que con sólo salir a la calle me ponía como un tomate y a mis rachas buenas me refiero a que podía estar en la piscina más de 15 minutos sin que me saliera ni una sola roncha. 

Pasé muy buenas temporadas hasta que un día de junio, de camino a la universidad a examinarme de educación física, noté que me salían demasiadas ronchas con respecto al clima que hacía. Digamos que había 22 grados en la calle, yo llevaba puesto un jersey de hilo y una camiseta de manga corta debajo, tenía mucho calor porque iba andando y hacía un poco de aire que se suponía que era bastante agradable. Sin embargo, cuando llegué a mi facultad, descubrí que no sólo tenía demasiadas ronchas, sino que me estaba mareando bastante. Con bastante me refiero a que no podía estar de pie y todo me daba vueltas. 

Dentro del examen, me mareé hasta el punto de tener que dejar de hacerlo y tumbarme un poco para que la habitación dejara de darme vueltas. Afortunadamente se me pasó rápido y pude irme a casa sin más problemas.

Pasaron dos o tres semanas desde entonces. Yo acababa de terminar los exámenes y me disponía a meter a mi tortuga a la piscina, la cual estaba a medio llenar y era el momento adecuado para que mi tortuga pudiera nadar sin preocuparse de cloros ni nada, únicamente para divertirse. El agua me llegaba por debajo de las rodillas y dejé a mi tortuga bañarse, pero yo me salí a los dos minutos de estar porque notaba demasiado picor. Una vez fuera de la piscina, mi cuerpo entero se llenó de ronchas y al marearme tanto me tumbé en la cama para ver si se me pasaba. Una hora más tarde llegaron mis padres de trabajar y decidí comer con ellos cuando, a mitad de la comida, mi cabeza daba muchísimas vueltas y mi cerebro mandaba órdenes a mis brazos, cuello, piernas y manos de mantenerme pero desafortunadamente no me llegaban esas órdenes. Literalmente, se me iba la cabeza. Mi padre me ayudó a subirme a mi habitación y yo no recuerdo nada, por lo que supongo que perdí el conocimiento. Durante todo ese día me estuve sintiendo mareada y con mucho malestar. Todo el calor se había ido de mi cuerpo y poco a poco mi cabeza iba volviendo a su sitio.

Esto es una historia real y con esto quiero decir y concienciar a la gente de que es algo muy serio y que si le sucede a alguien que se cuide. También me gustaría mencionar que muchas personas no lo entienden e insisten en que puedes quedarte 5 minutos más en la piscina, puedes ponerte pantalones cortos a las 4 de la mañana en verano, puedes estar en la orilla del mar en bikini, etc. cuando tu vida realmente corre peligro y puedes tener consecuencias muy graves, por no decir irreparables. Lo que comienza siendo una simple ruta de bici o moto puede terminar en el hospital inflada a antihistamínicos en vena. Tirada en el suelo con las piernas levantadas y mil mantas o en una caja.

A día de hoy, con 22 años, aún me siguen saliendo ronchas con poquito que haga. Lo que en un principio me salía pocas veces, a día de hoy me salen hasta en las palmas de las manos y de los pies. Hace poco descubrí que me salen dentro de las orejas y en las cejas. 

Con esto quiero por favor insistir que no es una tontería. Tened cabeza cada vez que me decís que vaya a ciertos sitios y os insisto en que lo paso mal, porque de verdad, lo paso muy mal. Os incluiré fotos según me vayan saliendo para que veáis el proceso y las señales que me dejan las ronchas, que sin duda prefiero esas señales a que me vuelva a suceder lo que me sucedió. 

Sed empáticos y estad en mi lugar y en el de otras muchas, o pocas, personas que padecen esto o peor.

Como siempre digo, espero que paséis un buen día, tarde o noche. Gracias por leerme y sed muy felices :)